Los divulgadores de la Noviolencia estratégica

Capítulo 19 de “Breve historia de la Noviolencia”, Jesús Castañar Pérez.

 - Índice - Capítulo siguiente>

Así pues, existe toda una línea de teorización estratégica en torno al uso de la defensa civil que ha sido aplaudida por el movimiento antimilitarista, pero que se aleja notablemente de sus planeamientos políticos (revolucionarios e internacionalistas). Son, por tanto, alternativas no militares de la defensa (es decir, defensa civil), puesto que las alternativas antimilitaristas en sentido más amplio abarcan un conjunto de transformaciones sociales que pretenden un cambio total en el sistema de organización social, de valores y actitudes, es un movimiento libertario revolucionario. Autores posteriores, como Michael Randle o Johnatan Schell,69 han trabajado en torno a propuesta de “resistencia civil”, con lo que se han situado en una postura más cercana al antimilitarismo, aunque sin abandonar el paradigma de defensa nacional que desde éste se evita. Hay que señalar, no obstante, que estas teorías de la defensa civil pronto eliminaron el calificativo de noviolenta para poder incluir actos de sabotaje o puede que incluso algún tipo violencia puntual moderada que encajaran dentro del concepto de resistencia civil que planteaban. Además, desde Australia, el Sweicht Action Group Wolongong, sección australiana de la IRG ha producido importantes textos que conectan el feminismo con las teorías de la noviolencia. Uno de sus activistas Brian Martin, a parte de las críticas a Sharp ya expuestas más arriba, ha realizado importantes estudios sobre diferentes dimensiones de la noviolencia y suya es la firma del clásico “Uprrooting War (Desarraigando la Guerra)”70 en el que siguiendo la línea de Bart de Ligt se expone el concepto de “Defensa Social” como sistema alternativo de defensa desde un punto de vista antimilitarista-pacifista.

De forma inversa a Gene Sharp, el francés Jean Marie Muller ha dirigido sus escritos a movimientos sociales de cualquier ámbito y su obra ha sido aplicada a diferentes contextos pues ha estado asesorando en países tan dispares como Polonia, India, Nicaragua, Líbano, Turquía, Chad, Haití, Brasil, Colombia o Camerún. Jean Maríe Muller era un profesor de filosofía francés que había sido objetor sobrevenido y que, a partir de 1970, dejó la enseñanza para dedicarse a tiempo completo a la investigación sobre noviolencia, más concretamente a su aplicación en términos de información, formación y acción. En 1974 fundo el Mouvement por una Alternative Non-violente MAN (Movimiento por una Alternativa no-violenta) desde el cual protagonizó huelgas de hambre junto con Lanza del Vasto entre otros, contra ensayos nucleares del gobierno francés. Esta organización ha sido una constante promotora de foros de discusión y acción para buscar sistemas de defensa alternativos. A partir de 1984 particiò en la creación del Institut de Recherche sur la Resolución noviolenta de Conflictos (IRNC) desde el cual ha lanzado su contribución teórica a la filosofía de la noviolencia, aunque su papel ha sido más bien como divulgador y resintetizador de las doctrinas noviolentas.

Muller influyó mucho en el movimiento noviolento español desde sus orígenes, con Gonzalo Arias a la cabeza (de quien volveremos a hablar más adelante), y con el sacerdote catalán Xirinacs, entre otros activistas y divulgadores de la noviolencia política, por ejemplo, Pepe Beunza, quien se declaró objetor en 1971 frente a un tribunal militar en plena dictadura franquista, después de haber conocido a Lanza del Vasto y la experiencia desobediente de los objetores franceses.

Para Muller es clave la distinción entre conceptos de psicología social tales como conflicto, agresividad, lucha, fuerza para establecer una diferenciación clara entre violencia y noviolencia, considerando esta última como una forma de acción con sus propias pautas propias, lo que la convierte en una estrategia social y política en sí misma. De este modo para este autor esta estrategia implica utilizar siempre técnicas de acción noviolenta, mientras que, en estrategias violentas o incruentas, se utilizan muchas veces técnicas noviolentas como formas de acción. Por lo tanto, Muller se fija en cuestiones tales como planificación, legitimidad y principios estratégicos como la no-colaboración o el desafío a la represión o rentabilidad de los medios de comunicación. Desde luego la importancia de su aportación radica en esa perspectiva estratégica que confiere a las formas de acción noviolentas, que evita el pragmatismo de miradas, como la de Sharp, que pueden desviar de principios básicos de la filosofía noviolenta como el del que el fin no justifica los medios.

Por otro lado ha habido otros autores e instituciones que se dedican actualmente a la divulgación de la acción noviolenta. En Estados Unidos, además de la Albert Einstein Institution de Sharp, la War Resisters League (la sección estadounidense de la IRG) o IFOR, está el International Center on Nonviolent Conflict en Washington, DC. Esta institución fue fundada por Peter Ackerman, coautor, junto con Jack Duvall de dos importantes revisiones históricas sobre acción noviolenta: A force more powerfull. (Una fuerza más poderosa) y Strategic Nonviolent Conflict: (Conflicto Noviolento Estratégico)71.

Además han producido el documental “Bringing Down a Dictator” (Derrocando a un Dictador) sobre la caída de Slobodan Milosevic en Grecia y una serie de televisión y un juego de ordenador basados en “A force More Powerfull”. En España, el autor que desde los 70 realizó la tarea de introducir las diferentes perspectivas de la teoría de la noviolencia fue Gonzalo Arias. Este autor de perspectiva pacifista cristiana que además de traducir textos anteriores de Thoreau, Tolstoy, Gregg, Gandhi o Muller72, entre otros, aportó su granito de arena a las teorías de la defensa noviolenta desarrollando la idea de un “ejército incruento”.

Paralelamente la sección española de la IRG, el Movimiento de Objeción de Conciencia, una suerte de coordinadora de colectivos antimilitaristas noviolentos que fue creada en los años 70 por objetores de conciencia y protagonizó durante treinta años la campaña de desobediencia más importante de la historia contemporánea de España, la que ayudó a abolir la conscripción-, a la par que diseñaba acciones noviolentas para sus campañas de insumisión al servicio militar, renovaba las formas de acción extendiendo las reflexiones del antimilitarismo a otros movimientos sociales. Esta organización, desde 2003 llamada Alternativa Antimilitarista-MOC, (junto con grupos que han ido surgiendo al socaire de su desarrollo histórico, colaborado o discrepando con él, como Utopía Contagiosa, o Gasteizkoak, y otras organizaciones como Kakitxat, el Arca de Lanza del Vasto, el Movimiento Internacional de Reconciliación, sección española de IFOR, Justicia y Paz, Universitat Internatcional de la Pau, Casa de la Paz de Sevilla, Asamblea Antimilitarista de Madrid, entre otras), también ha tratado de llevar a la sociedad el debate sobre la necesidad de una desmilitarización urgente e imprescindible.73

 

Notas

69 Michael Randle: "Resistencia civil. La ciudadanía ante las arbitrariedades de los gobiernos" Paidós Ibérica S.A.1998 y Jonathan Schell “El mundo inconquistable. Poder Noviolencia y Voluntad Popular”. Galaxia Gutemberg Círculo de Lectores. Barcelona 2003

70 Brian Martin en “Uprootin War” Fredom Press . Londres 1984

71 Peter Ackerman y Jack Duval “A force more powerfull. A century of nonviolent conflict”. Palgrave/St. Martins Press 2001 y Peter Ackerman y Jack Duval “Strategic Nonviolent Conflict: The Dynamics of People Power in the Twentieth Century” . Praeger 1994

72 Gonzalo Arias (comp.) “El Proyecto Político de la Noviolencia”. Nueva Utopía. Madrid 1973 (ilegal) o 1976 (legal).

73 Para conocer los mejores análisis de la experiencia protagonizada por el MOC y otros colectivo antimilitaristas a través de la campaña de insumisión debe consultarse: V. Sampedro Movimientos sociales: debates sin mordaza Desobediencia civil y servicio militar, Centro de Estudios Constitucionales, Madrid, 1997; Movimiento de Objeción de Conciencia: “En Legítima Desobediencia” Proyecto Editorial Traficantes de Sueños. Madrid 2002.; Pedro Ibarra (ed.), Objeción e insumisión, claves ideológicas y sociales, Fundamentos, Madrid, 1992; y Xavier Aguirre, Rafael Ajangiz, Pedro Ibarra y Rafael Sainz de Rozas, La insumisión, un singular ciclo histórico de desobediencia civil, Tecnos, Madrid, 1998. Algunos balances más recientes en: Rafael Ajangiz, “Objeción de conciencia, insumisión, movimiento antimilitarista”, Mientras Tanto, nº 91-92 (“25 años de movimientos sociales”, Verano-Otoño 2004); Pedro Oliver Olmo y David García Arístegui, “La evolución del movimiento antimilitarista: de las enseñanzas de la campaña de insumisión a los nuevos retos”, Libre pensamiento, nº 49 (2005), pp. 44-53