La operación Bacar, un dispositivo de guerra ha ocupado el Raval en la lucha contra el narcotráfico

La operación Bacar, Un dispositivo de guerra ha ocupado el Raval en la lucha contra el narcotráfico.

Más de 800 polícias a la vez que un helicóptero despertaba a las 7 de la mañana todo el barrio para realizar una operación acompañada de un sinfin de cámaras y micrófonos para detener a más de 50 personas, entrar en más de 30 domicilios y cerrar narcopisos por orden del juzgado 27 de Barcelona. Una operación de cine, con todo uso de medios a primera hora de la mañana mediante la que se pretende demostrar que si que hay una lucha contra el narcotráfico, que si se es eficaz cuando es necesario y que las quejas de los vecinos son infundadas pues se estaba trabajando y cuando ha sido necesario se ha efectuado el golpe “quirúrgico”.

Nunca se habia visto algo así, es nuevo, espectacular y da la impresión que el objetivo primero ha sido impresionar. No hay duda que resultaba insoportable el uso y abuso con total impunidad del fenómenos de los narcopisos, ocupando el espacio, molestando a los vecinos con total prepotencia y arrogancia ante la dejadez institucional. La movilización del vecindario de forma autónoma y asambleária, valiente y decidida es la que ha frenado, la que ha sacado el problema a la calle frente a la dejadez de bancos que no han denunciado en la mayoría de los casos los narcopisos, si por el contrario han denunciado a las familias que no han podido pagar los alquileres abusivos.

Este dejar hacer por parte del estado y el mercado genera malestar y malvivir y normaliza intervenciones al extremo que dan miedo, intervenciones que habrá que ver que resultado dan y que acercan soluciones cada vez más represivas a problemas sociales. Por eso no nos gustan, no queremos que se hagan así, queremos intervenciones sociales, queremos pisos en alquiler social, queremos recuperar para las vecinas los pisos abandonados por los bancos. Queremos que la iniciativa privada responda por sus desmanes y no lo tenga que hacer la administración con dinero de todos. estamos hartos de ver como se desahucian narcopisos y el propietario no los cierra, lo tiene que hacer el ayuntamiento, o los tenemos que recuperar las vecinas para un uso público.

Después nos extrañamos que ganen elecciones políticos corruptos y de mano dura, que haya una deriva autoritaria y neofascista en el mundo. Para aplicar mano dura mejor la gente sin complejos. Para aplicar soluciones justas ha de ser la movilización de la gente sin que el objetivo prioritario sea el de la ley y el orden. Lo venimos avisando hace tiempo, no queremos que nuestras acciones se resumen en pedir más policía, mayores penas y más gente a la cárcel.

El tiempo dirá el resultado de esta operación, mientras ocurría parábamos dos desahucios en el barrio, festejábamos el triunfo en México de la gente de Atenco que paraba después de 18 años de lucha contra el aeropuerto y defendía sus tierras y maldecíamos el triunfo “democrático” en Brasil de un presidente para el que no hay palabras para definir la magnitud del desastre. Nosotros, como el resto a luchar y a exigir nuestros derechos mande quien mande y si el que manda es más receptivo y nos hace caso pues mejor, sin nuestra exigencia estaremos en manos del desastre pues cada vez se sienten más fuertes.